Como cualquier proceso estratégico, la estrategia de marca trata de dar respuesta a problemas y necesidades previamente identificados definiendo un lugar al que llegar y pautando los pasos a seguir para lograrlo.
Vivimos en un contexto global y digitalizado. Un mundo que cada vez se mueve más rápido y no avisa. El concepto clave es VUCA: un concepto que describe nuestro entorno cada vez más volátil, incierto, complejo y ambiguo. El acrónimo proviene de las siglas de las palabras inglesas Volatility, Uncertainty, Complexity y Ambiguity.
Es el mundo en el viven y aspiran a sobrevivir todas las marcas. Estamos en un momento donde los cambios se suceden de manera continua. Y donde los altos estándares de calidad en productos y servicios han desplazado las propuestas de valor hacia discursos más emocionales y experienciales.
En este escenario, ¿cómo seguir siendo relevantes de cara a un usuario cada vez más informado, participativo y exigente? Ya no sirven las viejas reglas. Hoy, las organizaciones deben abanderar valores y creencias. Y los productos y servicios, experiencias.
¿Cómo competir, y sobre todo, cómo liderar bajo estas nuevas reglas? Con estrategias de marca que maximicen el potencial de las organizaciones y las impulsen hacia el futuro.
La estrategia de marca hace frente a la complejidad interna y externa que rodea a la organización con una mirada de clarificar y simplificar. Con la voluntad de maximizar su potencial conectando con el contexto y garantizando su crecimiento empresarial y crecimiento sostenible a lo largo del tiempo.
¿Cómo lograrlo? La estrategia de marca ofrece respuestas a cuestiones como:
La estrategia de marca es un proceso de impacto profundo en la organización. No sólo le ayuda a identificar un rumbo claro al que dirigirse en los próximos años, sino que además ofrece beneficios tanto a sus clientes y usuarios como a todos los demás públicos que le rodean:
Para lograr los objetivos planteados previamente es necesario plantearse cuestiones esenciales en clave de estrategia de marca:
Un proyecto de estrategia de marca es un proceso secuencial pero no necesariamente lineal, que va desde la reflexión y la introspección hasta la externalización de la nueva marca. Un proceso de plena interacción entre la organización y la consultora de branding con el fin de avanzar de acuerdo a los objetivos establecidos y al mismo tiempo de incorporar todas aquellas variables que surjan a lo largo del camino.
Para tener éxito se requiere poner sobre la mesa una serie de cuestiones previas al proyecto:
Tras más de 10 años de experiencia y centenares de proyectos de branding hemos creado estrategias de marca que han impulsado empresas y organizaciones en múltiples sectores y ámbitos geográficos. Resultado de este aprendizaje constante, disponemos de una metodología propia y manera de pensar, que hemos ido perfeccionando a lo largo del tiempo.
Trabajamos la estrategia de marca desde una triple perspectiva: propuesta de valor, relato de marca y cultura de marca.
La propuesta de valor es clave en la estrategia de negocio, la estrategia comercial. Una fuente de ventaja competitiva, visión y claridad en un mundo de procesos de toma de decisiones. Generar valor diferencial. Las preguntas clave de este enfoque estratégico son:
El relato editorializa la marca como parte de la estrategia competitiva de las empresa, ayudando a generar vínculos emocionales fuertes y duraderos. Las cuestiones clave que respondemos con este enfoque son:
Las empresas son sus personas y cultura es alinearlas hacia un futuro juntos. Un proceso hacia la creación de pilares culturales, valores, principios, dinámicas y acciones que surgen de un sentir común y una creencia compartida en la organización. Los retos específicos que se deben responder con este enfoque son:
La estrategia responde a estas preguntas. Probablemente tendrás muy claras algunas respuestas, dudarás en otras y desconocerás las restantes. Eso significa que tu marca puede desplegarse aún más, quizá dentro de su enfoque de propuesta de valor, relato de marca y cultura de marca. O, tal vez, en una combinación de estos tres enfoques para una mirada interna a tu marca, para una mirada hacia el mercado o para una perspectiva híbrida.
Cuando tengas las respuestas, deberemos dar vida al escenario estratégico resultante a lo largo del tiempo por medio de la acción y el movimiento, impulsando a la organización hacia el futuro por medio de productos, servicios y experiencias capaces de generar resultados tangibles.
A continuación te explicamos cada una de las fases de nuestro proceso en detalle:
La primera fase, de inmersión y de exploración, trata de comprender las realidades internas y externas de la marca para hallar un punto en común entre ellas que pueda transformarse en una propuesta de valor genuina, diferencial y relevante, en la mejor estrategia de branding de negocio.
En este proceso es clave la colaboración activa tanto con el cliente como con el usuario. Contar con ellos nos dará la información que necesitamos para hallar patrones y variables relevantes. Al mismo tiempo será clave entender el sector y la categoría en la que nos movemos, así como otros sectores paralelos y tendencias actuales.
De esta manera podremos acabar de identificar las oportunidades que buscamos para crear una gran estrategia de marca. Oportunidades que nos ayuden a proponer una nueva manera de contextualizar y situar marcos mentales en los que nuestra marca pueda ser líder y referencia.
La segunda fase consiste en la definición de la nueva estrategia de marca, y su expresión por medio de un relato. Este relato se enmarca en las oportunidades halladas en la fase anterior, y se sostiene en elementos de marca tales como la propuesta de valor, público objetivo, posicionamiento, atributos, beneficios e idea de marca. Una estrategia de comunicación de marca eficaz.
Editorializar la marca nos ayuda a:
Llega el momento de poner la marca en acción a partir de la estrategia de branding empresarial trabajada previamente. Para dotarla de movimiento serán necesarias pautas de actuación y de uso de tal manera que sus responsables no sólo sepan cómo y cuándo usarla adecuadamente, sino qué acciones específicas deben llevar a cabo para transformarla en una realidad.
La activación de marca se divide en ámbitos específicos:
Tras la fase de activación llega el momento ganar control sobre el movimiento llevando un seguimiento diario para evaluar el desempeño y tomar decisiones a futuro.
Para ello es fundamental pautar un cuadro de mando específico y personalizado con todas aquellas acciones emprendidas de tal manera que podamos asegurar que se llevan a cabo y monitorizar el nivel de éxito en cada una de ellas a lo largo del tiempo, y así comprobar la eficacia de la estrategia de crecimiento de negocio.
A lo largo de nuestra actividad en Comuniza permanecemos atentos a todas aquellas tendencias y acontecimientos que dan forma al branding de hoy y el de mañana, de tal manera que la estrategia de marca siempre es un proceso actualizado que revaloriza las marcas con las que trabajamos.
Publicamos artículos e informes sobre estrategia de marca, siempre pensados para ser accionados por parte de las empresas y organizaciones de la mano de nuestros expertos en branding.
Si te interesa alguna cuestión específica sobre estrategia de marca no dudes en contactarnos. Nos encanta conocer gente y recibir visitas. Pero sobre todo nos gusta emprender viajes y transformar marcas.